El Consejo Regional Indígena del Cauca CRIC, programa de defensa de la vida envían un caluroso abrazo y resistencia de los pueblos indígenas en el Cauca, lamentamos el recrudecimiento de la violencia que se está generando en los territorios e invitamos a estar muy alertas como comunidades a cualquier eventualidad.
Desde el ejercicio de gobierno propio de las comunidades debemos seguir posesionando y direccionando la defensa de la vida, atreves de las autoridades, la comunidad y la guardia indígena; tener mucho en cuenta que prima la integridad como organización, comunidades, familias pertenecientes a los territorios ancestrales; la situación se viene complicando cada día más, se vienen realizando acciones de delitos de lesa humanidad por parte de los grupos armados, como desapariciones forzadas de jóvenes, asesinatos de comuneras y comuneros indígenas, mayores espirituales, las amenazas, atentados que se viene presentando en las comunidades, son acciones de los grupos violentos la cual se rechaza enfáticamente y enérgicamente.
Las mujeres no han sido exentas de esta violencia, los grupos armados se han enfocado en afectarlas, principalmente a las niñas que engañadamente están siendo vinculadas al conflicto armado, vulnerando el derecho a la educación, salud, integridad personal y el derecho a tener una familia, situación que lamentamos, rechazamos y denunciamos ante la opinión pública, porque los actores armados vienen haciendo una “campaña” en las comunidades, que “no se permite la violencia contra las mujeres”, pero son estos mismos quienes accionan fuertemente la violación hacia estas ellas, vinculándolas al conflicto armado que no les pertenece, igualmente vulnerando los derechos que tienen las mujeres indígenas de los pueblos originarios.
Recordando que asesinaron en tiempos anteriores autoridades tradicionales como lo fue la mayora Cristina Bautista, Argenis Yatacué; y atentados como los que le realizan a la mayora Aida Quilcué, y que sin mas que decir el cinismo de estos actores armados manifiestan “NO SE PERMITE LA VIOLENCIA DE LAS MUJERES”, no hay coherencia ni revolución, cuando se afecta a la población civil, cuando se intenta acabar, la pervivencia de los pueblos milenarios, cuando se les prohíbe practicar sus usos y costumbres, cuando se quiere resquebrajar políticamente el ejercicio de gobernabilidad; esa no es una revolución que proteja al pueblo, por el contrario es una acción que profundiza el exterminio físico y cultural, de las comunidades.
El gobierno nacional tambien tiene que ver, sabemos que estamos en una transición de un gobierno alternativo, sin embargo hacemos un llamado al presidente Petro y al gobierno nacional, a que este cambio gire hacia escuchar y acoger, las propuestas que las comunidades han planteado, recoger la diversidad organizativa, cultural y geográfica que hay en los diferentes contextos, y de estos escenarios de conflicto de guerra que se vive, se han planteado estrategias de vida acordes a las comunidades, y por eso se hace el llamado al gobierno a que las impulse y las fortalezca por el bien de los territorios.
En este 2022 ya se acerca a los 90 comuneros asesinados situación que se lamenta a profundidad, el fin de semana antepasada hubo 4 asesinatos, 2 desaparecidos y esta semana ya hay 3 comuneros desaparecidos por actores armados (cifra dada por el programa de defensa de la vida y los derechos humanos del CRIC), delito considerado de lesa humanidad, acción que se viene presentando en las comunidades, por ende, se rechaza enfáticamente estas acciones.
Invitación a las comunidades y guardia indígena, a que sigamos en el principio de UNIDAD, defendiendo el territorio, familia, comunidades y organización por tal motivo exigimos a los actores armados tanto legales como ilegales que el conflicto no debe desarrollarse en medio de la población civil, ni utilizar a la población civil como escudos humanos, en ambos lados, dejando viviendas afectadas, al igual que comuneros confinados y colocando su integridad física en peligro, vulnerando los estandartes de derechos humanos, es importante darlos a conocer en los medios propios y alternativos, organismos defensores de derechos humanos tanto nacional como internacional.
«No nos vamos a acostumbrar a esta guerra, vamos a seguir caminando por la vida por el territorio, por la paz» y este sueño que tienen las comunidades no nos cueste la vida, este es un llamado al gobierno nacional y a los grupos armados, que respeten y no nos vinculen en su conflicto que tienen entre las fuerzas del estado, grupos ilegales y entre estos mismos que se disputan por beneficios particulares.
Por: Programa de comunicaciones y la red AMCIC