En alerta se encuentran las comunidades indígenas del Cauca después de que, en horas de la tarde del ocho de noviembre, el dirigente indígena Ovidio Hurtado, sufriera un atentado contra su vida en la vereda Santa Helena, en el municipio de Caldono, nororiente del Cauca.
Según información de las autoridades indígenas del territorio Sath Tama Kiwe, dos sujetos armados que se encontraban sobre la vía, intentaron detener el vehículo en el cual viajaba el mayor Ovidio Hurtado con su familia y su esquema se seguridad, situación que llamo la atención, pues según se indicó, la seguridad al percatarse de que los sujetos en la vía estaban armados, no se detuvieron, lo que ocasionó que les disparan, impactando el vehículo en el que viajaban en repetidas ocasiones.
En el lamentable hecho, afortunadamente el exgobernador indígena Ovidio Hurtado y sus acompañantes salieron ilesos. Inmediatamente se conoció sobre el atentado, la Guardia Indígena de Sath Tama Kiwe dispuso de un dispositivo para ubicar a los violentos que, al parecer, hacen parte de la disidencia columna móvil Dagoberto Ramos.
Desde el Consejo Regional Indígena del Cauca, CRIC, se rechazó de manera contundente este nuevo hecho de violencia que pone en riesgo la vida de los líderes y comuneros indígenas, lo que nuevamente pone en evidencia la falta de garantías a los derechos humanos y la pervivencia de los pueblos originarios de este país.
“En el 2018 se registraron 26 homicidios, en el 2019 fueron 108, en el 2020 se contaron 106, y en lo que llevamos de este 2021, son 81 los comuneros y líderes asesinados en el Cauca. Es una situación complicada, rechazamos la ola de violencia en nuestros territorios y exigimos al Gobierno Nacional que nos dé las garantías” expresó Mauricio Capaz, consejero mayor del CRIC, de la zona norte.