En el resguardo indígena Mandiyaco en Santa Rosa, territorio Tandachiridu Wasi, límite entre los departamentos del Cauca y Putumayo, el Sistema de Gobierno Propio realizó el proceso de socialización, un trabajo que se viene adelantando en las comunidades indígenas. Este espacio busca fortalecer el ejercicio de autonomía y evaluar los avances y desafíos en la implementación del Decreto 982 de 1999 y el Decreto 1811 de 2017, herramientas fundamentales para la protección de los derechos territoriales, políticos y culturales de los pueblos indígenas.
Históricamente, las comunidades hemos exigido el cumplimiento de compromisos por parte del Gobierno Nacional. La movilización de 1999 en la vía Panamericana marcó un punto al lograr que un Ministro del Interior se sentara a dialogar directamente con las autoridades indígenas. Fruto de esta lucha, se expidió el Decreto 982, que declaró la emergencia política, cultural y territorial de los pueblos indígenas, debido a la sistemática exclusión y el incumplimiento de más de 360 actas de compromiso en temas como educación, infraestructura y derechos fundamentales. Sin embargo, a pesar de este reconocimiento, las soluciones han sido aplazadas durante más de dos décadas.
En 2014, mediante el Decreto 1953, se estructuraron los Sistemas Indígenas en reemplazo de los programas sectoriales, incluyendo el SISPI, Administración Propia, Autoridad Territorial Economico Ambiental y Sistema de Gobierno Propio. No obstante, ante la falta de implementación, en 2017 las comunidades nos vimos obligadas a movilizarnos nuevamente, logrando la expedición del Decreto 1811, que establece una Comisión Mixta con la participación directa de ministros y directores de entidades, garantizando así la toma de decisiones sobre los recursos destinados a la superación de la emergencia de los territorios indígenas.
A pesar de estos avances, los retrasos en la asignación y ejecución de los recursos siguen siendo una problemática crítica. Durante el gobierno de Iván Duque, se acordó un plan de inversión, de los cuales solo el 56% fue ejecutado, dejando rezagadas áreas fundamentales como Planes de Vida, Comunicaciones, Mujeres, Jóvenes, Guardia Indígena y Derechos Humanos. Esta falta de ejecución ha generado tensiones en los territorios, donde las comunidades solicitan respuestas y soluciones concretas.
El Sistema de Gobierno Propio enfrenta además el desafío de su reconocimiento tangible, ya que el deber ser desde lo político organizativo, no se mide en términos materiales, sino en la capacidad de análisis, movilización y defensa de derechos. Esta realidad ha dificultado la asignación de recursos para su fortalecimiento, obligando a las comunidades a insistir en la importancia de su trabajo dentro de la estructura autonómica del CRIC.
Con este contexto, el espacio de socialización en Mandiyaco, territorio Tandachiridu Wasi, busca ajustar y orientar estrategias para garantizar que los recursos comprometidos para 2024 sean efectivamente ejecutados en esta vigencia.
Las comunidades indígenas seguiremos en pie de lucha, enfrentando el incumplimiento del Gobierno Nacional y reafirmando el compromiso con la autonomía y la pervivencia de los territorios.
Comunicaciones CRIC