Seguramente las expectativas de las comunidades que se concentraron en el Territorio de Convivencia, Dialogo y Negociación de la María Piendamo, a presenciar el dialogo entre las autoridades indígenas del CRIC y la mesa de diálogos de paz de la Habana, generaron diversos sentimientos; ya que se está hablando del fin de conflicto entre las Fuerzas Armadas de Colombia FARC – EP y el Gobierno Nacional, pero en las comunidades continua el conflicto.
Conflicto que ha afectado física y culturalmente a las comunidades indígenas y afrodecendientes de Colombia. Y precisamente estas comunidades, son las que deben estar informadas en su totalidad frente a los acuerdos firmados en La Habana Cuba y sobre el impacto que generara la implementación de estos acuerdos dentro de los territorios ancestrales.
El Trabajo de informar a las comunidades frente a los acuerdos que firmaron, le compete al Estado en cabeza del gobierno nacional y su estructura gubernamental desde lo nacional hasta lo local. En los territorios indígenas las Autoridades Ancestrales, Consejerías Zonales y Regionales deben analizar desde el pensamiento y sentir comunitario, las implicaciones de estos acuerdos, para que las comunidades conozcan y fortalezcan las acciones de protección territorial y no se vean afectados los procesos comunitarios por intereses individuales, teniendo en cuenta que hay un gran desconocimiento sobre el tema de los acuerdos.
En esta puja política que está viviendo el país, tristemente los Pueblos Originarios, hemos caído en otro de los juegos políticos que los partidos políticos del Uribismo y el Santísimo han iniciado con el Plebiscito, y donde también las FARC–EP, alimenta esta estrategia.
Ahora el pueblo de Colombia deben tomar parte con el SI o el NO, donde la prioridad no es garantizar la paz, si no alinearse a una posición del juego político, donde quienes se benefician y se acomodan son los politiqueros de siempre, el plebiscito no garantía ni representa en su totalidad, los distintos posicionamientos comunitarios en cuanto a la “PAZ”.
Frente a los acuerdos de paz, hay diversos temas que preocupan a las comunidades, uno de ellos la Jurisdicción especial Indígena, la cultura, la tradición y todo el proceso organizativo, aspectos que siempre han estado en riesgo por diferentes factores; ahora con el tema de la “PAZ” no es la excepción, ya que los diversos proyectos o “apoyos” que se implementarían a nivel de infraestructura, proyectos productivos y entre otros, generarían un desorden en las cotidianidades y prácticas de los pueblos Originarios; ahora tal vez no hayan agresiones con fusiles, pero con las leyes, los proyectos y la explotación del territorio, asesinarían el pensamiento y la autonomía de los pueblos.
Sin duda, los grandes desafíos que ahora enfrentamos para seguir perviviendo, recaeran en los jóvenes, niños y niñas de esta y las próximas generaciones, pero también en las autoridades Locales, Zonales y Regionales quienes tienen la obligación de retomar los procesos juveniles, la guardia indígena, las mujeres y la comunidad en general; para que la “PAZ” siga siendo construida desde los planes de vida de los pueblos, y no de desde los actores armados que promueven la guerra y tienen una idea muy distinta de la vida y la madre tierra, a la que caminamos milenariamente los pueblos.
Guardia indígena del territorio, comparte su reflexión sobre la necesidad de fortalecer la lucha milenaria para construir la paz.
Audio Guardia Indígena
Por: estudiantes de Universidad Autónoma Indígena Intercultural UAIN.