Las autoridades que conforman el Consejo de los Pueblos Naciones Indígenas Originarios del Tawantinsuyu, en uso de sus facultades legítimas, legales, y en el marco del derecho consuetudinario y ancestral preexistente que da origen a la autodeterminación y autonomía, levantamos nuestras voces ante la comunidad internacional teniendo en cuenta la libre expresión para defender nuestra cultura y la vida en cada territorio, donde por más de 520 años después de la invasión colonial de occidente hemos logrado resistir a los embates de la colonización y genocidio de nuestras culturas, usurpación de nuestros territorios ancestrales, discriminación, estigmatización  y abandono estatal.

Los Pueblos Indígenas de Perú, Bolivia, Ecuador, Colombia, Chile y Argentina, reunidos en solidaridad y unidad, emitimos este pronunciamiento político en respuesta a la profunda crisis política, económica, social, humanitaria, cultural y ambiental que afecta nuestras comunidades, ocasionada por los gobiernos de esencia colonial que, de manera sistemática, han transgredido nuestros derechos fundamentales.

  • Desde las cuatro regiones del sol denunciamos la violación permanente y sistemática de los derechos fundamentales y culturales de los pueblos, al territorio, a la autonomía y autodeterminación, a vivir en armonía de acuerdo a nuestras propias formas organizativas, a la libertad de expresión, a la participación efectiva en la construcción de país. Los gobernantes de Chile y Argentina que por siglos le han declarado la guerra al pueblo Mapuche por sus tierras y sus acciones reivindicativas de derechos, en Perú las masacres de indígenas en los últimos 10 años en su legítimo derecho a la protesta social, en Ecuador en donde históricamente las confrontaciones de las elites del poder político y económico han perseguido a los pueblos pertenecientes a la CONAIE, ECUARUNARI y hoy, la política del nuevo gobierno tiene al país en estado de excepción, militarizado los espacios de vida, violando el derecho a la consulta previa libre e informada de los pueblos originarios en cada suyu donde resistimos al modelo de muerte con nuestra propuesta de vida.
  • Hoy en Bolivia los hermanos de Ayllus y Markas de Potosí FAOI NP, que conforman la CONAMAQ, son perseguidos por el gobierno actual, quien ha instrumentalizado la justicia y ha dictado órdenes de captura, a los líderes indígenas que hacen ejercicio de la protesta social para defender el estado plurinacional, orquestando un golpe orgánico en complicidad con sus funcionarios públicos del estado y un contingente policial armado sin respetar la democracia y nuestra libre autodeterminación, nuestros  estatutos  normas y procedimientos propios, en Bolivia ya no se vive en un estado de derecho, este gobierno está endeudando al país con créditos internacionales, adjudicando nuestros recursos naturales LITIO a empresas transnacionales sin respetar los derechos colectivos  de las naciones y pueblos indígenas originarios  así como el ejercicio propio y dueños legítimos de la tierra y territorio  vulnerando la consulta previa libre e informada que hace parte de la constitución nacional de Bolivia.
  • Hoy se escucha el clamor al mundo del pueblo Mapuche organizados en el Movimiento por la autodeterminación del pueblo Mapuche PIKU MAPU, que desde el gobierno de Piñeros decreta el Estado de Excepción constitucional que aún permanece, la militarización del Wallmapu, trayendo consecuencias nefastas para nuestro pueblo, avasallando nuestras formas organizativas y violando flagrantemente el derecho fundamental a la consulta previa consagrada en la constitución nacional.
  • Denunciamos enérgicamente las acciones políticas, económicas, sociales, culturales y territoriales que constituyen violaciones flagrantes a nuestros derechos al territorio, a la vida, a la cultura, cosmovisión y autonomía, entre otros. La vulneración de estos derechos ha generado consecuencias devastadoras para nuestras comunidades, poniendo en peligro nuestra existencia misma y afectando de manera irreparable nuestro entorno natural y cultural.

Por lo anterior, los pueblos originarios del Tawantinsuyu pedimos intervención de los organismos internacionales y a la comunidad internacional para que se respete la vida y las formas propias de organización de cada uno de nuestros pueblos.

  • Ante esta situación crítica, hacemos un llamado urgente a los organismos internacionales de protección de los derechos humanos, en especial a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y otros organismos relevantes, para que intervengan de manera inmediata y efectiva. Exigimos que se investiguen y sancionen las violaciones a los derechos fundamentales de nuestros pueblos, garantizando la protección, vigencia y respeto de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC) de nuestros pueblos.
  • Llamamos a la comunidad internacional a solidarizarse con nuestras causas y a respaldar la preservación de nuestras vidas y formas propias de organización. Instamos a los organismos internacionales a ejercer su papel de contrapeso y supervisión, promoviendo la rendición de cuentas y la justicia en cada país afectado. La intervención política y jurídica es esencial para detener la impunidad y garantizar la protección de los derechos constitucional e internacionalmente reconocidos en los instrumentos nacionales e internacionales que resguardan los derechos de los pueblos indígenas en todo el mundo.
  • Exigimos que se respete nuestra diversidad cultural, nuestros modos de vida tradicionales y nuestras prácticas ancestrales. Reclamamos la garantía de nuestro derecho a la consulta previa, libre e informada, como mecanismo fundamental para la toma de decisiones que afecten directamente a nuestras comunidades.
  • Rechazamos toda celebración del supuesto bicentenario de la independencia en los países sudamericanos, porque constituye una farsa histórica, que más bien permitió la consolidación del colonialismo bajo la fachada de una falsa república en nuestros países. Las consecuencias de esta farsa histórica lo estamos sufriendo hoy en día, con la violación cotidiana de nuestros derechos fundamentales y los genocidios y etnocidios ejecutados por las élites de origen europeo.

En un contexto de creciente amenaza contra nuestros territorios y modos de vida, reafirmamos nuestra resistencia pacífica y llamamos a la solidaridad internacional para proteger la integridad de nuestras comunidades y la sostenibilidad de nuestro entorno, a la vez que, hacemos un llamado urgente a la acción conjunta y coordinada de los organismos internacionales y la comunidad internacional para detener las violaciones a nuestros derechos, asegurando así la pervivencia, un futuro justo y equitativo para los pueblos y  las generaciones venideras.

!! Por la defensa de nuestros derechos, territorios, ¡la vida y la autonomía! Principio del formulario

CONSEJO DE LOS PUEBLOS INDIGENAS ORIGINARIOS DEL TAWANTINSUYU.

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