Bogotá, 5 mar (EFE).- Indígenas de la región del suroeste de Colombia capturaron hoy a cuatro presuntos integrantes de las disidencias de la antigua guerrilla Fuerzas Armadas Revolucuonarias de Colombia (FARC), quienes habrían asesinado a un nativo, informó la Fiscalía.
Miembros pertenecientes a la Guardia Indígena del resguardo de Pioya y Jambaló (en el departamento del Cauca) «capturaron a cuatro presuntos miembros de las disidencias de las FARC que al parecer habrían participado en el homicidio del líder comunero indígena Eider Hurtado», explicó el comunicado.
Las comunidades indígenas tienen el derecho a juzgar los hechos que ocurran dentro de su territorio mediante su propia jurisdicción, así como a protegerse con la Guardia Indígena, una fuerza de orden público propia.
La Fiscalía señaló que el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) «está apoyando en las labores criminalísticas e inspección técnica del cadáver».
Por su lado, el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) detalló en un comunicado que los capturados merodeaban cerca de la casa del Cabildo Indígena de Pioyá, en el municipio de Caldono, «con armas de largo alcance y granadas» para liberar a tres prisioneros que estaban bajo su custodia.
Según el CRIC, la persecución por parte de la Guardia Indígena para capturar a los intrusos se saldó con la muerte de Eíder Campo Hurtado, quien formaba parte de la Guardia y también era comunicador.
Tras el incidente, la Guardia Indígena y miembros de las comunidades apresaron a ocho personas, denunció el CRIC, aunque en ningún momento mencionaron que fueran integrantes de grupos disidentes de las FARC, que no aceptan el acuerdo de paz.
Las FARC se desmovilizaron a raíz del acuerdo de paz entre la guerrilla y el gobierno colombiano firmado en noviembre del 2016, pero algunas facciones disidentes continúan operando al margen del proceso de paz en regiones del país como el Cauca. EFE
Tomado de lavanguardia