Autoridades indígenas del oriente caucano alertaron cómo su territorio ha sido -históricamente- objeto de invasión por parte de los actores armados; “nuestros comuneros son objetivo militar de falsos positivos por parte de la fuerza pública”.
Cauca/ Siete comuneros asesinados en acciones militares

 

Foto: Instituto Popular de Capacitación

Las autoridades indígenas del oriente caucano pertenecientes a los pueblos indígenas totoroez, nasas, misak, polindaras, ambaloes y kisgueños, agrupadas en el Consejo Territorial de Autoridades Indígenas del Oriente Caucano, Cotaindoc, denunciamos ante la opinión pública nacional e internacional que:

De un tiempo acá nuestros territorios son objeto de invasión por parte de los diferentes actores armados, siendo nuestros comuneros objetivo militar de falsos positivos por parte de la fuerza pública; estamos a merced de los grupos armados.

Hechos:

El 30 de enero de 2008 en la vereda La Chulica, resguardo indígena de Kizgó, fueron masacrados en un falso positivo por parte del ejército nacional, Batallón de Alta Montaña No. 4, los compañeros Roberth Helmer Astaiza, Luis Carlos Otero Velasco y Elias Pechené Pillimue, pertenecientes a los resguardos de Kizgó y Ambaló.

El 17 de septiembre, 2008, en la vereda Jerusalén municipio de Jámbalo en otro falso positivo, por parte de una patrulla militar del Batallón Pichicha, cae Justiniano Tunubala Tizu, compañero indígena perteneciente al resguardo indígena de Pitayo quien ejercía el cargo de pastor de la iglesia evangélica.

El 16 de diciembre del mismo año en jurisdicción del resguardo indígena de Totoró, municipio de Totoró en otro falso positivo realizado por el ejército nacional fue herido gravemente el compañero Edwin Legarda, quien horas después falleció en la clínica la Estancia de la ciudad de Popayán.

En hechos reciente el pasado 02 de agosto, 2009, a eso de las cinco de la mañana salieron de su casa de habitación a la finca a ordeñar sus vacas pero nunca regresaron, la comunidad en conjunto con la guardia emprendieron la búsqueda que termino encontrando los cuerpos sin vida de los comuneros indígenas Luis Antonio Sánchez de 70 años de edad y de Higinio Sánchez de 40 años ambos miembros de una misma familia, padre e hijo, pertenecientes al Cabildo indígena de Polindara, municipio de Totoró, de quienes no tenemos conocimiento de autores ni actores.

Hasta donde se tiene conocimiento, los comuneros asesinados no habían sido objeto de amenaza alguna, al contrario eran comuneros reconocidos y activos que gozaban del aprecio de los familiares y vecinos de la región.

Como hemos denunciado las autoridades tradicionales en reiteradas ocasiones este es un hecho más de violencia perpetrada por actores armados que operan en la región, para el último desconocemos la procedencia de las balas asesinas que terminó con la vida de nuestros hermanos.

De igual manera reiteramos que la guardia indígena, nuestra organización y nuestras iniciativas autónomas no son, no han sido, ni serán, ni harán parte de ningún actor armado llámese como se llame, grupos armados ilegales: guerrillas, paramilitares.

Tampoco trabajaremos la mano con instituciones del Estado (ejército, policía, cuerpos de inteligencia militar y otros), como lo manifestó el Ministro del Interior y Justicia Fabio Valencia Cossío el pasado 31 de julio en el acto de instalación del inicio del proceso de los Planes de Salvaguarda para el pueblo indígena Totoró. Estas aseveraciones lo que pretende es involucrarnos en el conflicto social y armado que desangra y acaba con nuestro país.

Dada la magnitud de nuestra situación, hacemos un llamado a las organizaciones defensoras de los derechos humanos, a los organismos humanitarios, a los pueblos indígenas, a los órganos de control del Estado, a la comunidad internacional, a las organizaciones sociales, a las iniciativas de paz y a todos aquellos que luchamos por una vida digna a realizar acciones necesarias y urgentes para superar esta difícil situación que se vive en el Cauca y otras regiones del país.

Advertimos que la presencia del ejército nacional, como de grupos armados al interior de nuestros territorios en nada contribuye al libre desarrollo de nuestros pueblos, al contrario generan desplazamientos masivos -a pueblos y ciudades- aumentando más el cordón de miseria y de necesidades.

La guerra no contribuye en la solución negociada del conflicto social y armado

Consejo Territorial de Autoridades Indígenas del Oriente Caucano, Cotaindoc

Silvia Cauca, agosto 10 de 2009

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