La incertidumbre en torno a la elección del próximo Fiscal General de la Nación en Colombia ha alcanzado un nuevo nivel de preocupación, ya que, a pesar de la importancia del cargo y la proximidad de la fecha de salida del actual fiscal, Francisco Barbosa Delgado, la Corte Suprema de Justicia aún no ha seleccionado al candidato idóneo. Este proceso, que debería ser transparente y eficiente, ha experimentado retrasos que generan inquietud en la ciudadanía.

La Corte Suprema de Justicia convocó nuevamente a las ternadas Ángela María Buitrago, Amelia Pérez Parra y Luz Adriana Camargo para escuchar sus propuestas y aclarar inquietudes. Estas audiencias, llevadas a cabo de manera individual en los despachos de los magistrados, buscan profundizar en los planes de gestión de las candidatas. Este proceder, aunque puede ser considerado necesario para tomar una decisión informada, ha prolongado la incertidumbre en el país.

El proceso de votación iniciado el 25 de enero se vio afectado por la decisión de 15 de los 23 magistrados de la Corte Suprema de votar en blanco, lo que llevó al aplazamiento del proceso hasta el 8 de febrero. Además, la declaración de impedimento de tres magistrados, incluyendo el presidente de la Corte, Gerson Chaverra Castro, ha añadido complejidad a la situación, aludiendo a la existencia de parientes trabajando en la Fiscalía.

Es esencial destacar que la elección del Fiscal General de la Nación es un asunto crucial para la estabilidad y eficacia del sistema judicial. La demora en este proceso podría tener consecuencias negativas, dejando a la Fiscalía sin liderazgo definido y afectando la continuidad de importantes investigaciones y procesos judiciales.

Durante las audiencias, las ternadas presentaron propuestas significativas para abordar los desafíos actuales del sistema judicial. Ángela María Buitrago abogó por la implementación de nuevos mecanismos y el uso de tecnología para desarticular la corrupción y el crimen organizado. Luz Adriana Camargo propuso modelos de investigación con enfoque territorial, reconociendo las diferencias en la criminalidad a lo largo del país. Amelia Pérez Parra, por su parte, destacó la necesidad de combatir la corrupción y fortalecer las Unidades de Reacción Inmediata (URI).

La falta de una decisión clara y rápida en este proceso genera preocupación entre la ciudadanía y diversos sectores sociales e indígenas. Columnistas y ciudadanos han expresado la urgencia de acelerar el proceso para evitar que la Fiscalía quede en interinidad, pidiendo que se elija un nuevo Fiscal General antes del 14 de febrero.

En este contexto, es importante instar a la Corte Suprema de Justicia a actuar con prontitud y responsabilidad en la elección del Fiscal General. La independencia y autonomía del órgano judicial deben ir de la mano con la sensibilidad ante la situación actual del país. La demora en la toma de decisiones puede afectar la confianza de la ciudadanía en las instituciones judiciales y socavar la eficacia del sistema de justicia.

En este momento crítico, la resiliencia del pueblo colombiano es fundamental. Es necesario confiar en la capacidad de las instituciones para superar los desafíos y garantizar una elección transparente y acorde con los principios constitucionales. La prudencia y la celeridad son clave para preservar la integridad del sistema judicial y fortalecer la confianza de la ciudadanía en el Estado de Derecho.

Por: Programa de comunicaciones CRIC, Nacional.

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