Nueva persecución contra un alguacil en Jambaló

El pasado viernes 21 de agosto de 2009, justamente al terminar la Audiencia Pública donde en representación del Estado, la ministra de Relaciones Multilaterales le pidió perdón al Pueblo Nasa por el asesinato de Germán Escué, el compañero Joaquín Emilio Yatacué Uino sufrió un atentado, que se suma a la continua persecución que viven comuneros comprometidos con el proceso político organizativo.

[ Autor: Tejido de Comunicación ACIN]

 

Joaquín Emilio Yatacué, es alguacil de la vereda Pitalito, que hace parte de la zona alta del resguardo de Jambaló. Este joven fue asediado por dos hombres armados cuando se desplazaba entre los límites de Zumbico y de Pitalito, precisamente cuando regresaba a su hogar después de participar en la Audiencia Pública realizada en la vereda de Vitoyó.

Los hombres armados sin mediar palabra le hicieron tres disparos al alguacil, quién salió corriendo por más de un kilómetro escapando de los disparos, creyendo que los desconocidos se habían ido, pero éstos lo seguieron hasta cerca de la casa, donde le hicieron otro disparo, seguramente para amedrantarlo. Afortunadamente el joven salió ileso. Lo complicado de esta situación es que el atentado contra Joaquín, es un hecho más de la persecución que viene sufriendo desde hace algún tiempo.

Hace tres meses, cuando este alguacil regresaba de cumplir con las labores como representante de la vereda, en la vía a Jambaló, cuatro sujetos desconocidos que se movilizaban en dos motocicletas lo alcanzaron en plena carretera y le tomaron fotografías a eso de las 2 de la tarde. Él nunca supo quiénes eran, pero este hecho resulta extraño en un resguardo donde la gente por lo general se conoce.

Además de ese hecho, un mes después en los limites entre La laguna y Paletón lo abordaron dos personas encapuchadas, le pidieron los documentos y le preguntaron que por qué salía cada ocho días al pueblo. También le advirtieron: «no ande más por esos caminos porque no le vamos a perdonar la vida y si es posible, lo podemos dejar aquí mismo!».

Esta persecución contra el alguacil de la vereda Pitalito, tiene bastante conmovida a la comunidad y sobre todo a los familiares, porque no es posible entender que después de la Audienca Pública que se dio 21 años después del asesinato de Germán Escué, donde las comunidades una vez más demostraron que siguen en pie de lucha y que no están de acuerdo con ningún actor armado, atenten contra la vida de un alguacil que lo único que hace es servir a la comunidad.

Las comunidades ratificaron que no están de acuerdo con los actores armados porque su accionar no beneficia a nadie, por el contrario, violan los derechos humanos en los territorios indígenas, y traen terror e intimidación, tal como lo que sucedió  con Joaquín Emilio Yatacué, joven de 24 años de edad que casi siempre se ha dedicado a ayudarle a toda la familia y a acompañar a su padre que se encuentra hemiplégico desde hace más de 12 años.

Este alguacil es un indígena Nasa que no ha tenido ningún vínculo con ningún actor armado, es más, nunca ha salido del Departamento ni en busca de trabajo. El siempre ha estado pendiente de la salud de sus padres,  entregado al proceso organizativo de la comunidad y del Resguardo. No tiene ningún antecedente dentro de la vereda y es reconocido por ser un joven trabajador que ha pasado por muchos esfuerzos y muchas  dificultades personales y familiares, ya que proviene de una familia muy humilde.

Este comunero sólo este año empezó a colaborar directamente como alguacil, un trabajo que desempeña sin ánimo de lucro, pero con mucho ánimo para defender la posición política de los indígenas del resguardo y de su comunidad, por eso hacemos un llamado a todos y a todas a que nos acompañemos entre pueblos para seguir resistiendo pacíficamente.

Pueblos ancestrales se reunieron en la Minga de Arte Indígena en la ciudad de Popayán

Diferentes pueblos indígenas se reunieron en el parque caldas de la ciudad de Popayán, en la primera Minga del Arte indígena. Un evento realizado por el Programa de Comunicaciones del Consejo Regional Indígena del Cauca-CRIC. Conozcamos algunas de sus raíces ancestrales

Nasas: Yu´ es la señora y A’ es la estrella y de esta relación nacieron los Nasas- algunas familias recibieron los apellidos del sol, la luna, el viento, los truenos, los ríos, pero los apellidos YU’THEGU fueron los especiales como guardianes de las aguas y las semillas de vida.

Totoroez: La ley de origen de pueblo Tontuna es el fundamento de existencia que evidencia de donde provenimos, y tiene como relación estrecha y armónica con los seres y espíritus de la naturaleza que habitan en nuestros territorios, por lo tanto, son el eje principal de los derechos y saberes que tenemos, que nos da identidad como Tontuna.

Kokonukos: según cuenta los mayores que antes era naturaleza, paramos, montañas, lagunas, ríos y riachuelos. En los más alto de los páramos resplandecían dos grandes picos de nevados que adornaban las montañas: era el volcán de Puracé y el Volcán de Sotará. Estos dos nevados se comunicaban uno con el otro a través de surcos de fuego. Pero llegó un tiempo en que estos explotaron en el centro de la cordillera y produjeron una gran avalancha y esta se descuelga cordillera abajo y descansa en la gran meseta de Popayán. En medio de la avalancha venia una enorme serpiente que bajo con la avalancha y esta se quedó en la meseta y al morir surgen otras vidas-, es allí donde nace el pueblo Kokonuko.

Eperaras-Siapidaras: “Según el mito, al principio nuestro planeta se encontraba, sin animales, seres humanos, agua, en forma de un desierto. Mucho tiempo después apareció una mujer llamada Tachinawe es una playa llamada Pizarro situada en la desembocadura del rio Baudó, en el departamento del Chocó. Ella se alojó en esa hermosa playa y así paso mucho tiempo hasta que se dio cuenta de que estaba embarazada. Pasaron días y meses hasta que llegó el momento del parto y nació el niño al que llamó Tachiakhore.

Quizgó: “Antes en el tiempo de los tiempos, no había nada sobre el espacio, hasta que de pronto surgió una energía, en formas de camino que empezaron andar en círculo muy rápido… Con el pasar del tiempo se formó una gota de agua, empezó a caminar sin evaporarse o extinguirse por muchos años. Posteriormente se encontró con otras energías y la gota de agua chocó y se formó una masa que hoy la conocemos como la tierra- el Piro”. Así empezó la vida físico espiritual de la vida del pueblo Kishu…Hijos de la laguna, de la mujer… Por eso nuestro territorio es mujer madre hiladora de la vida garantía permanencia y pervivencia… es nuestra madre ella, nos cuida y nos da todo. ”

Yanaconas: el viento de las montañas y los páramos y las lagunas del Macizo colombiano traen consigo las notas de las flautas que carrizo que se mezclan en tamboras produciendo los bambucos tradicionales, ritmos que nuestros runas y warmis con sus pasos puchisquiados entrelazan en el suelo haciendo figuras de invitación, de cortejo y alabanza a nuestros aborígenes.

Por: Programa de Comunicaciones-CRIC