“Hasta que no se devuelva la dignidad a los pueblos afros e indígenas wayuu, del departamento de la Guajira, estaremos resistiendo por el respeto a nuestros derechos”, fueron las palabras de Eliel Castillo, líder indígena del departamento de la Guajira, quien lidera una huelga de hambre en el parque Simón Bolívar de la ciudad de Rioacha.
Los pueblos indígenas del departamento de la Guajira, afirman que no cuentan con agua, que el vital líquido sigue siendo un problema sin resolver en esta región del país, además, indicaron que la crisis en la salud y la educación, problemática que se hizo más evidente en tiempos de pandemia, obligaron, hace varios meses, a que los jóvenes de las comunidades afrodescendientes e indígenas del pueblo Guajiro, iniciaran una huelga de hambre permanente.
La huelga, para esta oportunidad, es acompañada por una comisión del Consejo Regional Indígena del cauca, CRIC, que en el marco de su lucha organizativa busca orientar dinámicas en la defensa de la vida, la democracia y los derechos humanos de los diferentes pueblos originarios y sectores sociales del país. En ese sentido, Nohelia Campo, exconsejera del CRIC, y líder permanente, indicó que el gobierno nacional tiene que tomar medidas urgentes que permitan hacerle frente a las las multiples acciones que son resultado del modelo económico que ha agudizado la pobreza y los problemas sociales en este sector del norte de Colombia.
Tanto los líderes indígenas, así como los representantes afros del departamento de la Guajira y los visitantes del Consejo Regional indígena del Cauca, CRIC, afirmaron que se mantienen tejiendo unidad, reflexionando sobre la agreste actitud de abandono y olvido institucional, pero sobre todo, indicaron que la huelga de hombre en el parque Simón Bolívar, en Rioacha, es la primera acción de exigencia, de un cúmulo de iniciativas de resistencia, que seguramente se fortalecerán, si el establecimiento no propone soluciones a la grave crisis económica, social y a la vida que hoy padecen los pueblos étnicos en el país.
Por lo anterior, hasta que la dignidad no se vuelva costumbre, los pueblos indígenas y sectores sociales continuaran con sus acciones de exigencia y resistencia.
Por Programa de comunicación CRIC