El pasado 4 de abril entre la vereda Betania y la Peña del resguardo indígena de los Totoroez, fueron agredidos por integrantes de la policía nacional, los comuneros indígenas, Luis Alfonso Pillimue exgobernador del pueblo Totoroez y Miguel Antonio Morales joven del pueblo Misak, acción donde resulto involucrado el patrullero Alex Rodríguez, guarda espaldas del alcalde municipal de Totoro, frente a estos hechos el alcalde municipal José Fernando Conejo, convoco el pasado martes 8 de abril a un consejo de seguridad al cual fueron citados, el Coronel de la policía departamental, el comandante del ejército, el comandante de policía de Totoro, la defensoría del Pueblo, la personería Municipal, la fiscalía, representantes de la gobernación del Cauca, consejería del CRIC, cabildo indígena de Totoro, gobernadores indígenas del municipio de Totoro, la guardia Indígena, líderes, ex gobernadores y algunos comuneros del resguardo, también se hicieron presentes los comuneros agredidos y sus familiares.
Los mandos militares presentes en el consejo de seguridad de manera enfática afiman que todos los operativos realizados por la fuerza pública son legales e incluso están contemplados en la constitución nacional, pero sobre todo que dichos operativos son realizados especialmente para proteger y garantizar la vida y los derechos de toda la ciudadanía. “Cuando ingresamos a la fuerza pública, lo hacemos para servir desde la institucionalidad a la ciudadanía y juramos defender la vida y los derechos de toda la población, las fuerzas militares tenemos en nuestro ADN la vocación de servicio y llegamos hasta el punto de dar la vida por garantizar los derechos y la seguridad de la ciudadanía”. Manifestó el coronel de la policía departamental. Frente a la participación del escolta personal del alcalde municipal de Totoro, en las acciones del 4 de abril, el comandante de policía de Totoro negó enfáticamente dicha participación.
Afirmaciones falsas y totalmente contradictorias a las realidades que se viven en las comunidades, pues en este mismo espacio los comuneros agredidos relataron lo sucedido en la madrugada del 4 de abril, cuando fueron obligados a salir de su vivienda por 40 integrantes de la policía nacional, quienes sin identificarse los encañonaron, los tiraron al piso, los maltrataron física y psicológicamente, los insultaron señalándolos de guerrilleros y amarrados los trasladaron hacia la carretera principal donde se encontraban dos camionetas cuatro por cuatro y un camión. Afortunadamente la guardia indígena llego hasta el lugar donde tenían retenidos a los comuneros y lograron rescatarlos, acción que fue reconocida y agradecida por los comuneros afectados, la autoridad tradicional y la comunidad.
El mayor Luis Pillimue ex gobernador del cabildo de Totoro, agredido por la fuerza pública menciono que su único delito ha sido trabajar la tierra y frente a lo que paso, hubiera sido mejor que de una vez lo asesinaran y no haber sido mal tratado ni humillado como lo hicieron quienes dicen ser defensores de los derechos de las comunidades, menciona que además de las agresiones personales, le hurtaron alrededor de 15 mil truchas, nueve millones de pesos y se llevaron sus documentos de identidad. Por su parte el Joven Miguel, manifiesta que el daño que le ha ocasionado la policía nacional, como joven, como persona lo afectara para toda su vida y el actuar de la fuerza pública ha sembrado gran desconfianza y rechazo a las fuerzas militares, por las que antes sentía confianza.
Las instancias institucionales como la personería, la fiscalía y el CTI, con competencia en esta zona, manifestaron no estar informados sobre ningún proceso de allanamientos, capturas u operativos en la comunidad de Totoro, lo que muestra claramente un procedimiento indebido dentro del territorio indígena que ocasiono la violación de los derechos individuales y colectivos del pueblo Totoroez por parte de integrantes de la policía nacional.
Frente a los abusos y violaciones ocurridas en el territorio del pueblo Totoroez, el gobernador del Cabildo Indígena de manera enfática expreso su gran preocupación afirmando: “Hemos estado conviviendo con el enemigo, con lo que ha pasado en mi resguardo se pierde total y netamente la credibilidad en la fuerza pública, porque en un consejo de seguridad del pasado 25 de marzo habíamos acordado respeto mutuo, le dimos tanto debate al tema y creo que fue tiempo perdido, ese día hablamos del panfleto firmado por las águilas negras donde amenazan a comunidades de varios resguardos de la zona incluido Totoró, donde finalmente dicen que no servirán las demandas porque todo está a su favor, las acciones que en el panfleto anunciaban las águilas negras, la policía las realiza a través de un operativo el pasado 4 de abril. Entonces para mí no hay duda de que son ustedes, la policía nacional son las denominadas águilas negras. Por eso, ahora con más fuerza convoco a mi comunidad y la guardia indígena a fortalecer las acciones de control territorial haciendo retenes y recorriendo el territorio de manera permanente. Y a la fuerza publica exijo respuesta clara e inmediata sobre quien ordeno dicho operativo y porque siguen haciendo disparos de fusil en las noches generando zozobra entre la comunidad. Y como autoridad no vamos a permitir que la fuerza pública siga cometiendo abusos en el territorio.
De igual manera la autoridad tradicional del pueblo Misak teniendo en cuenta que un comunero de su territorio también fue afectado por la policía nacional, respalda la posición del gobernador indígena de Totoro, rechaza de manera rotunda el actuar de las fuerzas militares y recalca que cuando se hace daño o se afecta a un comunero, se afecta también a todo su pueblo. Por su parte la consejería del Consejo Regional Indígena del Cauca CRIC, ratifico el respaldo total a las determinaciones de la autoridad tradicional de Totoro, llamaron a unificar las acciones de defensa territorial y el ejercicio de gobierno propio en este sentido el caso de violación a los derechos individuales del pueblo Totoro y Misak se asumirá desde la justicia indígena.
Finalmente la fuerza pública no dio ninguna respuesta concreta frente a las acciones violatorias cometidas el 4 de abril en la comunidad de Betania del resguardo de Totoro, lo único que hicieron fue tergiversar el tema, evadir las preguntas y mencionar a Dios en todas sus intervenciones. El comandante de la policía pidió perdón bajo la presunción de inocencia al ex gobernador Luis Alfonso Pillimue y al joven Miguel Antonio con el ánimo de minimizar la trascendencia de los abusos ocasionados, justificando las graves faltas cometidas a nombre de la protección y garantía de los derechos de la población.
Lo ocurrido en el resguardo indígena de Totoro el pasado 4 de abril, es solo un ejemplo de los muchas acciones violatorios de los derechos fundamentales de los pueblos, las autoridades tradicionales recordaron el asesinato de Edwuin Legarda en el año 2009 en el territorio Totoroez, también mencionan el asesinato de un medico tradicional hace algunos años en el municipio de Toribio por parte de la fuerza pública, el asesinato de dos comuneros y la tortura de otros dos por parte de la brigada 29 del ejército en el resguardo de Caldono, hechos que han sido asumidos por la justicia ordinaria y la justicia penal militar, los cuales han quedado en la más total impunidad. En este sentido se ratifica la decisión de no permitir acciones de ningún grupo armado en los territorios indígenas, adelantar de manera conjunta y permanente las acciones de control territorial en defensa de la vida y la dignidad de las comunidades, de igual manera ejercer la autonomía y la gobernabilidad en los territorios indígenas.
El Cabildo indígena de Totoro, iniciara las acciones de control y protección territorial desde el ejercicio de la autonomía y convocara en los próximos días a una audiencia pública, mientras avanzan las investigaciones y el proceso para la aplicación de justicia en el marco del derecho propio.
Proceso de Comunicaciones y Cultura Radio Libertad Totoro
Proyecto político – Comunicaciones CRIC