Como muchas otras problemáticas generadas a causa de la crisis que vive Venezuela, en el municipio de Puerto Carreño, capital del departamento del Vichada, muchos indígenas de los pueblos Amorúa, Sikuani y Sáliba decidieron ubicarse en la parte colombiana de sus territorios ancestrales, hace más de tres años, sin embargo se encontraron con la negligencia y el abandono estatal de un país que ignora su situación de vulnerabilidad, teniendo que ubicarse en asentamientos humanos en condiciones deplorables, que se agudizaron con el paso de la pandemia, inclusive han llegado a vivir de los desperdicios del relleno sanitario municipal.

Uno de los argumentos que ha utilizado el Gobierno Nacional para no atender esta situación, es que dichos Pueblos no se encuentran registrados como indígenas, negando así el derecho a la autodeterminación.

Adicionalmente, el día 03 de diciembre, el menor de edad ALEXANDER RODRÍGUEZ de seis años de edad, muere a causa de la inasistencia medica sufriendo episodios de diarrea, vómito y fiebre, además de que llevaba muchos días sin comer.

Ante los anteriores hechos desde el Consejo Regional Indígena del Cauca, ahora CRIC Nacional, exigimos que tanto el Gobierno Nacional como los entes de cooperación internacional y las organizaciones que velan por los Derechos Humanos, brinde la Acción Humanitaria de Emergencia que se necesita en esa situación específica para salvar las vidas de los Pueblos Indígenas que se encuentran en riesgo, además de brindar las acciones pertinentes a corto y largo plazo para darle solución a esta problemática que cada día se agudiza más.

Por: Programa de Comunicación CRIC

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